jueves, 3 de abril de 2014

El azar escribe poesía

Me gusta la idea de la evolución porque, en parte, significa la promesa de un avance hacía mejor del hombre. Y no sólo físicamente. El avance intelectual de la raza humana es vertiginoso si lo comparamos con las mejoras imperceptibles de nuestros cuerpos. Hace un par de milenios, creíamos necesario e imprescindible la matanza de nuestros semejantes para aplacar la ira de algún dios; hace pocos siglos, se consideraba imprescindible para la paz social torturar y ajusticiar a cualquier persona que pusiera en duda los dogmas religiosos. 

Me pregunto, si no estaremos yendo en contra de la evolución al aceptar los sistemas de reproducción asistida. Pero si nos ponemos quisquillosos, en tal caso, tampoco se debería permitir la mejora genética en laboratorio. Hoy mismo hablaban en la radio de la posibilidad de eliminar el gen que favorece la aparición del cáncer. Aún suena a ciencia ficción, pero no parece tan lejano si pensamos que es posible que nuestros bisnietos disfruten de la erradicación de semejante pandemia. 

Me ha dado por la teoría de la evolución porque ayer me prestaron la película La duda de Darwin. Es entretenida, pero sabe a poco. Recurrí a Youtube para buscar algunos documentales. Escuché uno muy interesante mientras corría, Darwin y la teoría de la evolución, bastante en la línea de lo que se espera de un documental: preciso, conciso, presentando hechos más o menos probados. Hoy al mediodía seguí buscando documentales y me topé con esto:


Sólo es una retahíla de negaciones y de poner en duda las evidencias para intentar llegar a la conclusión que sólo una vida de inteligencia superior a la nuestra ha podido crear la vida (¡¿?!) - imprescindible la redundancia de la palabra vida, para dejar claro lo ridículo de la explicación.

Niegan la antigüedad de la Tierra; el que la teoría de la evolución no parta de la creencia que es posible la creación de la vida a partir de la materia; la sedimentación por estratos del terreno (abajo los más antiguos, arriba los más modernos)... y niegan que algunas mutaciones puedan ser beneficiosas. 

Y lo más ridículo: niegan que se pueda crear poesía al juntar un grupo de letras sueltas. ¿Nunca han jugado al Scrabble? Al poner las letras en el soporte, ¿cuántas palabras le ha formado el azar? Si jugara con mil fichas, ¿cuántas palabras seguidas se le formarían? Si jugara durante años, ¿cuántas frases se le formarían? Si fueran mil los participantes, ¿cuántas poesías se le formarían? El azar sólo necesita cantidad y tiempo para crear poesía, y la naturaleza necesitó lo mismo para crear vida.

4 comentarios:

  1. El azar hace maravillas, y con el tiempo es capaz de sorprendernos. Lamentablemente si dejamos que el azar haga lo suyo, la humanidad desaparecería, como ya lo está haciendo. Creer que un ser superior nos creó, es para muchos algo más fácil de digerir que entender que provenimos de una alga marina. Y tal vez tengan razón, quizás una raza alienígena tomó la tierra como laboratorio, hizo todo lo que tenía que hacer, lo cual nos incluye. y luego desaparecieron. Por esa razón nuestros ancestros creerían en la existencia de dioses, pues los vieron partir al azul profundo del cielo. En lo personal prefiero pensar que nunca hubo un principio, y tampoco habrá un final, pues los mismos están conectados. Algo así como: nosotros nos creamos a nosotros mismos, literalmente.

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    1. Eso de que la vida (un ser superior) creó la vida (a nosotros) es como la pescadilla que se muerde la cola, porque no se aclara lo que se pretende explicar (qué extraña es la gente que se conforma con una falsa aclaración).

      Puede que esos aliens que nos han creado, no hayan desaparecido de nuestra existencia, y estén esperando (como ocurre en 2.001, Una Odisea en el Espacio) ver cuándo logramos salir de nuestro agujero (la Tierra) y tener un mínimo de adelanto tecnológico.

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  2. Me encantan estos temas, leí en su día el viaje del Beagle, con todos los relatos de Darwin y disfruté mucho. Un ferviente creyente que dejó de serlo, o al menos fue más excéptico.
    Me gusta también la definición de la Biología que me dieron en unas clases de esa ciencia:
    -La Biología es la ciencia que estudia COMO es la vida, seguida de una larga exposición, pero como segunda premisa:
    -La Biología no sabe QUE es la vida, ni PORQUÉ ni PARA QUÉ.
    Como nota curiosa de aquel libro es que Darwuin, en su estancia en Argentina, comentó que la mujer ESPAÑOLA de Buenos Aires era la más elegante que había visto. En realidad ya hacía unos cuantos años que aquel país se había independizado de España, pero sus raices eran españolas. Aún no se había producido la inmigración masiva.

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    1. Los creyentes se toman a la tremenda estos temas, obstinándose en negarlos (inventando mil trolas para intentar explicar que fuimos creados por un ser superior). Lo más cómodo para ellos sería aceptar la evolución y hacer a Dios creador de la energía (eso sí que es un gran misterio). Aunque, según la ley de la conservación de la energía, ésta ni se crea ni se destruye, sólo se transforma.

      No conocía esa de premisa de la Biología. Es interesante. Nunca me había preguntado para qué servimos los humanos (tal vez para carganos la Tierra y da lugar a un gran agujero negro).

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