jueves, 15 de enero de 2015

Callo

Mi madre piensa que la nueva portada de Charlie Hebdo es una provocación, ganas de dar un puntapié en el trasero de los yihaidistas. Yo callo y me trago mi opinión porque no creo que sirva de nada. ¿Qué habría ocurrido si los dibujantes de Charlie Hebdo se hubieran amilanado? ¿Qué habría pasado si cinco millones de franceses no hubieran salido a las calles a comprar su ejemplar por miedo? Los terroristas habrían aprendido que las libertades se recortan derramando sangre. Yo creo que Luz, el dibujante de la nueva portada del semanario satírico, es un héroe. 

Si nos atenemos a los hechos, con este atentado los terroristas han conseguido: 
- Difundir por todo el mundo unas caricaturas vistas sólo por una minoría y ya olvidadas. 
- Revivir una revista que estaba en bancarrota.
- Que muchos musulmanes griten: No en mi nombre
- Hacer que muchas gente comience a confundir musulmán con terrorista. 
- Morir por una mentira. Lástima que la muerte, la inexistencia absoluta, los haya librado de darse cuenta de su error. 

En la manifestación de París en apoyo a la libertad de expresión y las víctimas de los atentados, había una niña con una pancarta: Los malos sois tontos. Tanta simpleza y tanta realidad. 

2 comentarios:

  1. La libertad de expresión es en sí un tema muy delicado, tanto como lo son los disque derechos humanos. Una cosa es que puedas decir lo que quieras, y otra cosa es que lo debas decir, desde el punto de vista de moral. El acto en sí es injustificable, pues nadie tiene derecho sobre la vida de otras personas, pero la razón del acto es, en cierto modo, entendible. Para muchos, la fe ciega es algo intocable, y la religión, al igual que la moral o la integridad de las personas deben ser respetadas.

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    1. En este caso creo que la libertad de expresión debe estar limitada, principalmente, por el temor a los daños colaterales, más de lo que se pueda o no decir. A veces es muy complicado guardar respeto por las creencias ajenas cuando no se comprenden. La posibilidad de que otros sufran por lo dicho por mí, es lo único que me puede frenar.

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