viernes, 25 de diciembre de 2015

La casa de los pájaros fantasma

Lo confieso, me decepcionó mucho poder, por fin, entrar en una de partes clausuradas del caserón al que le estamos haciendo un informe de estabilidad, y no encontrar, al menos, un cadáver. La dueña tenía la extraña costumbre de ir tapiando trozos de pasillo, impidiendo el acceso a habitaciones, a medida que se marchaban quienes vivían con ella. Al final ni siquiera se molestaba en limpiar las habitaciones antes de colocar las tapias, y así nos hemos encontrado con baños en los que aún, después de una década o dos, aún tenía junto al bidé una toalla cubierta de polvo y, a pesar de ello, parecer impoluta, o botes de champú, volcados por la torpeza de alguna alimaña, con los restos de su contenido solidificado. 

El último rincón sin acceso sólo apareció cuando los planos comenzaron a cuadrar. Los otros habían sido evidentes gracias a las ventanas de las fachadas. Este estaba en el centro de la planta baja. Era una habitación y una tortuosa escalera de caracol que no llevaba a ninguna parte. Como en los pueblos están íntimamente ligados al pasado y tardan en olvidarlo, el mismo señor que me ayudó a dar mamporros y abrir un agujero en la pared, supo decirme que aquella había sido la habitación de la criada de la casa, Paca la de los Huevos. el apodo no derivaba de un valor desmedido, sino de vender huevos la madre de esta señora. La criada se fue alrededor de 1971 para casarse y la dueña de la casa comenzó su costumbre de poner paredes a los recuerdos. Tuvo que ser gris y triste la vida de la criada en aquella habitación sin luz natural. 

Por toda la casas hay cadáveres de pájaros muertos, sobre todo en la planta ático. Lo extraño ha sido encontrar el esqueleto de una paloma, enterrada en el polvo de cuatro décadas y media, en el primer escalón de la escalera de caracol. ¿Cómo llegaría ahí? ¿Cómo fue su lenta agonía? ¿Cómo pudo la dueña del caserón soportar durante días el zureo del bicho moribundo?


Esqueleto de paloma enterrada en el polvo de cuatro décadas y media

2 comentarios:

  1. A la vista resulta que la paloma parece estar enterrada en nieve.
    Me gustan esos misterios. Disfrutaría, aunque ya más como mirón, que como parte activa.
    En cuanto a los cadáveres de pájaros, siempre me he preguntado los pocos que se ven en nuestro entorno. Como si tuvieran un cementerio oculto como se dice de los elefantes.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Terminé enharinada en polvo. Las botas que suelo utilizar para las obras son de color marrón, terminaron grises.

      Esta semana tengo que volver a esa obra. ¡Hemos encontrado un sótano! Y nos han dado permiso para acceder a él. Ese edificio es todo un misterio. Estoy disfrutando mucho. Es como si fuéramos arqueólogos.

      La planta ático de ese edificio está llena de cadáveres de palomas y otros pájaros. Creo que la mayoría se quedaron atrapados cuando comenzaron a cerrar las ventanas sin darles oportunidad a escapar, pero otros debieron de buscar su nido cuando comenzaron a sentirse mal y les llegó la muerte. Supongo que la mayoría de los cadáveres de los pájaros están en las copas de los árboles, en sus nidos.

      Eliminar